martes, 19 de septiembre de 2017

San Pateo (Año 2). Días 3-5. "Todo lo que sube necesariamente baja"

San Pateo (Año 2). -
Días 3-5. "Todo lo que sube necesariamente baja"

¡Ay, mamina! San Pateo ha caído con toda su fuerza sobre mí. Y es que no se puede celebrar tanto ni hasta tales horas. Bueno, en realidad, desde el sábado tampoco he trasnochado tanto. Mejor dicho: ¡casi no he trasnochado! ¿Será que ya estoy pal arrastre y uno ya no tiene edad para estos saraos? Vaya usted a saber, oiga.

Los que sí están para esto saraos y muchos más son U.H.P., trío de Blimea que ha vuelto por sus fueros y así lo volvieron a demostrar en el Gong, al que regresaban tras una exitosa actuación hace unos meses. Parece mentira pero han transcurrido 27, sí, 27 años desde que en una tarde gijonesa de Concurso de Maquetas en la sala La Fábrika me quedara alucinado con su peculiar concepto que bebía sus buenos tragos de The Doors antes de que la película de Oliver Stone los devolviese a lo más alto. En concreto, fue un 13 de junio de 1990. Con su magnífico himno "alternativo" de Asturias, con su hit "El disidente" o con las esenciales "Dicen" y "Es jodido olvidarte". Sacaron su segundo álbum en 2015  -"Un tenedor en el país de la sopa"- y han vuelto con renovada fuerza, siempre con ese tono ácrata de Pedro "Patuco" Catalán, aunque mucho más rockeros y afilados en sus guitarras que antaño. Antes, la velada sabatina había comenzado con Fly Mosquito, una hora y media más tarde de lo anunciado -casi baten un concierto hace meses en la Lata de Zinc que comenzó con casi cuatro horas de retraso- lo que no fue mala cosa porque así me dio tiempo a acercarme entre las actuaciones de ambos y ver un poco del concierto de Losone en la plaza del Paraguas. Ni acercarse a la plaza de la Catedral, por supuesto. Fly Mosquito, liderados por Gustavo González, todo un histórico del rock en la ciudad, sacaban nuevo disco ("Al diablo con los prejuicios") y lo presentaron con esa efervescencia inmediata que tanto se escuchó en esa movida madrileña que quedó sepultada por los millones del éxito de muchos de ellos. Rememoro a grupos de las Hornadas Irritantes como Sindicato Malone o Glutamato Yeyé, con los que esta formación establece un extraño y sugestivo nexo y me quedo con las ganas de escuchar el disco. Un montón de conversaciones y saludos me hacen perder a Gus. Otro día me lo pasas. Llegamos sin problemas al Paraguas donde Losone ya llevaban un buen rato. Tan sólo poder escuchar dos otres de esas canciones suyas tan personales. Les había visto en su presentación de su segundo -"El domador de versos"-  en La Salvaje hace unos pocos meses y se nota más el peso de las guitarras en su propuesta. 



Llego a casa, miro el reloj y... ¡pero si son las 2 y media de la mañana! Tempranísimo: enciendo la tele y escucho un poco de la programación musical que he preparado para la noche en RPA. Decididamente, son otros tiempos.

El domingo es día de fútbol: el Real Oviedo frente al Cádiz, que viene de líder. No podemos olvidar a Los 155 que se quedaron fuera del estadio Ramón de Carranza el día del ascenso aunque ya hayan transcurrido dos años. Esas cosas incomprensibles que suceden y que convirtieron a amba entidades en enemigos. Ganamos 1 a 0 y lo celebro por todo lo alto, mientras evoco mentalmente el "Let´s celebrate" de The Stranglers. Tan celebrado es que, al llegar a mi casa, caigo sobre mi cama para no levantarme ya hasta el lunes. Zzzzzzzzzz.


El lunes es un lunes con todas las letras. Un lunes oscuro, de lluvias intempestivas que se repiten con fuerza inusitada durante unos cuantos minutos. Comienza a notarse la llegada del otoño y los días de luz declinan mucho más temprano. A uno le invade cierta melancolía mientras uno de esos chaparrones se desata y su crepitación sobre los cristales de las claraboyas de mi casa se convierten en una música indeseada. Mejor si la lluvia no te coge desprevenido en plena calle. Es lunes y hay que descansar, que no se puede estar "up!" todo el tiempo y una bajada a destiempo siempre es lo peor. 

MANOLO D. ABAD

Para remontar la bajada, nada mejor que uno de los temazos del nuevo de The War On Drugs