domingo, 31 de mayo de 2009

Lagartija Nick, ayer en Gijón


Aún bajo "El Shock de Leia"... No, en serio, amigos: ¡Qué necesarios son Lagartija Nick para este mundillo amariconado del indie! Y, si encima, recuperamos una conversación aparcada hace demasiados años, pues genial. Habrá que disfrutar al máximo una velada completa pronto. Lo espero. Mañana la crítica del concierto.

sábado, 30 de mayo de 2009

Una historia de Lagartija Nick


El 12 de octubre de 1990 acudí a la sala Universal de Madrid donde el sello independiente madrileño Romilar-D presentaba a su escudería: Lagartija Nick, Pleasure Fuckers, Sex Museum y The Amateurs. Con estos últimos había llegado esa misma tarde en un par de automóviles. En uno, conducido por Paco Loco y Tomás Ferrero -batería en aquellos momentos- íbamos el bajista de la banda y compañero en nuestro grupo común (La Tortuga de Sheffield) Fernando Abargues y yo. En otro coche viajaban los dos guitarristas del grupo, Miguel Fuentes y José Andreu, y la mayoría del equipo de los ovetenses. Cerca de Madrid, jugando entre Tomás y Paco tuvimos un pequeño percance en plena autopista. Paco Loco, que iba a ejercer de técnico de sonido esa noche, algo necesario dado que conocía a la perfección los juegos de guitarras que se producían entre Jose y Miguel, relajó el ambiente en el hotel exhibiéndose por el balcón del mismo completamente en pelotas, algo que solía hacer con frecuencia en aquellos tiempos.
Comimos todos los grupos juntos a excepción de Lagartija Nick y nos presentaron a Rosas En Blanco y Negro, unos tipos de Valladolid con pintas muy singulares. Una vez en la sala, abrieron Lagartija Nick y nos dejaron a todos helados: Gran potencia guitarrera, una elaboración desde el afterpunk hasta las inquietudes más ruidosas de finales de los 80 (de Sonic Youth a Band Of Susans, de Seattle a Nueva York) sin desdeñar la psicodelia. Canciones tremendas como "No lo puedes ver", "Tan raro, tan extraño, tan difícil" o "Hipnosis" que irían saliendo en sucesivos singles hasta que llegó su primer álbum, una soberbia muestra de lo que eran capaces en ese momento y también titulado "Hipnosis". Recuerdo que se me acercó Kike Turmix para corroborar que eran "bestiales". Un año después, el 14 de noviembre de 1991, en una exhaustiva gira estatal, recalaron en Oviedo, en la ya desaparecida sala La Real y la impresión fue aún mejor, quizás porque ya conocía mejor su repertorio. Una contundencia fuera de toda duda, pero sabiendo extraer las posibilidades melódicas de un repertorio macizo y sin concesiones.
Ha pasado mucho tiempo. Han recorrido un camino de inquietud que les llevó incluso hasta el trash-metal y, por supuesto, su celebrada unión con Enrique Morente en el imprescindible "Omega". Y parece que, por fin, tras casi dos décadas de lucha, empiezan a ser valorados por ciertos popes. El grupo sólo conserva a sus dos mariscales de campo, Antonio Arias -líder indiscutible- y a Erik Jiménez, a quien el gran público conoce más por su labor en Los Planetas. Ni qué decir tiene que les espero como agua de mayo. Ahora el indie, lo alternativo, se ha convertido en un territorio repleto de mansedumbre (al que llaman erróneamente folk-rock) y autocomplacencia. Y creo que es más necesario que nunca que grupos como Lagartija Nick, surgidos en aquella excitante frontera de finales de los 80 y principios de los 90 donde se forjó el término "alternativo", agiten un poco ese mortecino panorama. Esta noche tendré la respuesta y estoy seguro que no me defraudarán.

viernes, 29 de mayo de 2009

Mañana en Gijón



A partir de las 22 h. en la sala Albéniz de Gijón (C/San Bernardo, 62) uno de esos conciertos que no hay que perderse por nada del mundo: Lagartija Nick. Una de las formaciones imprescindibles para entender el rock alternativo, siempre en el filo del riesgo y con una trayectoria discográfica marcada por la inquietud.