Crítica. Música. –
“Romper todo y empezar de
nuevo”
BAJA
CALIFORNIA+RORSHACK+TRUESIGHT+POLINOMIO
Plaza Feijoo, Oviedo.
Domingo 14 de septiembre
de 2014
“Romper todo y empezar de nuevo” es el subtítulo del
libro de Simon Reynolds “Post-punk”, un denso volumen donde recorre toda la
historia del movimiento after-punk y de sus múltiples protagonistas. Muchos son
los estilos que se han propuesto renovar o regenerar el rock con diferente
suerte. Sin embargo, en estos concursos se captan demasiadas veces las lagunas
que muchos músicos tienen, enfrascados en sus obsesiones y con una perspectiva
algo corta. Nada se puede hacer ante ello, pero ese onanismo musical genera esa
sensación de dejà vu más veces de las deseadas. Nada se rompe pero sí que
parece que estamos empezando de nuevo con la mente algo vacía o demasiado
entretenida en recorrer autopistas demasiado trilladas, en ofrecer propuestas
agotadas desde perspectivas muy convencionales.
Rorshack montaron su peculiar aquelarre apocalíptico
de trash-metal y guturalidad de fin del mundo. Nada nuevo que no hayamos visto
en otras formaciones y el sólo argumento del tormento de decibelios a la mayor
gloria de la hecatombe en un infierno dantesco. Es probable que cuando Green
Day abarrotaron en 1994 la ovetense sala El Antiguo en la gira de su álbum
“Dookie” muchos de los componentes de Truesight no hubieran nacido. Para
quienes sí los vimos, su propuesta nos recuerda a bandas de ese calado, también
Offspring se aparecieron en alguna de sus canciones. Lástima que otros
referentes que podrían haber manejado como Husker Dü no alcancen a su
repertorio. Seguro que lo enriquecería bastante.
Polinomio se sitúan en una posición completamente
distinta. No son émulos fotocopiados de nada y buscan territorios poco
explorados que parecen haber pasado al olvido ante el lustre de otras
propuestas musicales. Cuando de repente te transportan a las guitarras del
“Seventeen seconds” de los primeros Cure te das cuenta de que aquí hay más
ambición que en otras opciones. Y eso que en ese intento de rock atmosférico
quizás no sea el formato trío la mejor elección. Sonaron con solidez y
sensibilidad (no confundir con sensiblería, por cierto). Aún están en la
búsqueda de algo que, sin duda, será propio y personal, eso que tantas veces
echamos en falta.
Cerraron la noche Baja California cuarteto de rock
setentero que han triunfado en diversos concursos antes de que llegara la
jornada de descanso del lunes.
MANOLO D. ABAD
Publicado en la edición papel del diario "El Comercio" el martes 16 de septiembre de 2014