viernes, 15 de enero de 2016

Sobre Manolo D. Abad Luis Arias Argüelles-Meres hoy en el diario "El Comercio"

Luis Arias Argüelles-Meres me dedica hoy su columna en el diario "El Comercio". ¡Muchas gracias, compañero!

http://blogs.elcomercio.es/panorama-vetustense/2016/01/15/panorama-vetustense-manolo-abad/?ns_campaign=WC_MS&ns_source=BT&ns_linkname=Scroll&ns_fee=0&ns_mchannel=FB

PANORAMA VETUSTENSE
"MANOLO ABAD"

La asociación de escritores de Asturias hará entrega mañana de sus Premios en diferentes modalidades, entre las que se encuentra el galardón al columnismo periodístico que este año distingue a Manolo Abad, que, como saben, es colaborador de EL COMERCIO en estas mismas páginas.
Ante todo, quiero dejar dos cosas muy claramente de manifiesto. En primer término que no sólo me llena de orgullo ser compañero de Manolo en estas mismas páginas, sino que además es un honor formar parte del mismo inventario de galardonados en esta apasionante modalidad que es la del artículo periodístico.
Manolo Abad y Oviedo, o, si se prefiere, Manolo Abad y Vetusta, su Vetusta, la de muchos de nosotros, la ciudad nocturna que alumbra en distintos rincones de la noche melancolías varias a ritmo de blues. La Vetusta en la que la mejor música encuentra acomodo. La vetusta que, por las noches, no es perezosa, sino viva y heterodoxa. La Vetusta que, como la regentiana, no tiene prisa.
Manolo Abad y el columnismo independiente. En un contexto donde tanto y prolifera el periodismo más mercenario y maniqueo, hay, por fortuna, voces independientes que, lejos de sumarse linchamientos mediáticos, inequívocamente orquestados desde determinados ámbitos, dicen lo que piensan y sienten sin más servidumbres que las que marca la coherencia y el decoro de cada cual.
No voy a entrar en este sentido en el mayor o menor grado de acuerdos o desacuerdos que nos puedan unir o separar a quienes hacemos columnismo, sino en lo que acabo de apuntar, esto es, en la independencia de criterio que constituye, sin duda, el mayor reclamo para la credibilidad irrenunciable que debe alcanzarse en la opinión periodística.
Y, en este sentido, Manolo es todo un referente. Y es que tengo para mí que cualquier columnista que se precie debe ser un guerrillero de la opinión, nunca un soldado que obedezca los dictados de determinadas operaciones de acoso y derribo, o de todo lo contrario: de adulaciones que, por indignas, dan lugar al baboseo más repelente.
Manolo Abad atesora, por otro lado, además de una voluntad de estilo siempre constatable en sus artículos, saberes varios que van desde la música, hasta la literatura. Pertenece a ese viejo y casi extinto oficio que en su momento fue cultivado por “escritores de periódico”, donde el cómo no cuenta menos que el qué, o, si se prefiere, donde la forma es tan importante como los contenidos.
Manolo Abad, por sus columnas desfilan no sólo el universo literario y musical de Vetusta, sino también la buena literatura.
Y a ello debe sumarse un añadido nada baladí, y es su columna de los lunes sobre el Oviedo, sobre ese equipo de fútbol que llevamos en los genes como un componente decisivo de nuestra infancia, como una pasión que nos nos hace desfallecer en los fracasos y que se alimenta de glorias comunes, que diría Renan, algunas de ellas vividas, otras transmitidas, pero, en conjunto vívidas.

Manolo Abad, columnista completo y complejo, en cuyos artículos tienen acogida la buena literatura y la independencia de criterio. No es poco, ciertamente.
¡Enhorabuena, compañero!.

LUIS ARIAS ARGÜELLES-MERES