viernes, 20 de noviembre de 2015

Envolvente encanto

 

Crítica. Música. -

Envolvente encanto”


JANE WEAVER
Lata de Zinc, Oviedo.
Miércoles, 18 de noviembre de 2015
A veces, cuando las cosas se tuercen y todo parece que va a ir mal surgen pequeños momentos que devuelven la esperanza y lo transforman en algo bueno. Eso debieron pensar Jane Weaver y los cuatro componentes de su grupo cuando se quedaron sin sus instrumentos y amplificadores gracias a la eficacia con los equipajes de las compañías aéreas y el personal de aeropuertos. Pablo y Jose -dos de los responsables de la sala- pusieron su agenda echando humo para encontrar en la ciudad sustitutos para sus instrumentos y sacar el concierto adelante. Superado el problema, con una veintena de personas en la sala, quedaba lo más importante: la actuación. Y ésta se saldó con brillantez, de menos a más, logrando envolver al público en sus densas y hechizantes atmósferas, de ritmos hipnóticos por donde la voz angelical de la Weaver se filtra como una luz al final del túnel.



Jane Louise Weaver ha tocado en su carrera diferentes registros y eso se nota en su buen hacer, en su soltura escénica que, poco a poco, fue deslizándose sobre las tablas y en ese gélido encanto que insinúa y sugiere entre climas vaporosos sobre los que levitan unos ritmos de psicodelia espacial que atrapan como un campo magnético. Presentaba la de Liverpool su sexto álbum en solitario “The Silver Globe” (2014) -título basado en el film de Andrej Zulawski “On The Silver globe” (1988)- donde se sumerge en una ensoñación de lisergia que podría recordar a bandas como Hawkind en una alquimia donde The War On Drugs se abrazan con el triphop en una estimulante simbiosis donde su voz parece levitar en un contexto onírico, casi mágico y logró convencer a un público que acabó ensimismado por su buen hacer. Una propuesta interesante, atractiva y que desarrollaron Jane Weaver y su banda con suma brillantez en una magnífica hora de actuación a pesar de haber tenido que salvar todos los elementos que parecían haberse puesto en su contra.
MANOLO D. ABAD
Fotos: M.D.A.