Vetusta
Blues. -
"El futuro de los espacíos vacíos"
Hablemos del futuro de Oviedo. De sus espacios vacíos que se abren
como una oportunidad para transformar la ciudad de cara a las décadas
venideras. Hablamos de urbanismo, de un nuevo diseño para que Oviedo
se reinvente a través de espacios como La Vega o el antiguo Huca.
Evitar ruina y podredumbre, crear un nuevo Oviedo lejos de proyectos
megalómanos, con racionalidad y, por supuesto, transparencia.
Para quienes hemos permanecido atónitos, pero no callados (varios
artículos desde esta misma columna) contemplando lo acontecido con
la Plaza de Toros, nos echamos a temblar viendo las reticencias del
Ministerio de Defensa para entregar a la ciudad los terrenos de La
Vega, o al evaluar los tibios y nada claros planes para los terrenos
que ocupa el antiguo Hospital. Parecen unos obstáculos subsanables
si los dirigentes e incluso esa hasta hora oportunista oposición
(los, como dicen ellos, de la lista más votada en las pasadas
municipales, más pendientes de encontrar giretas -reales o
imaginarias- en el tripartito) se dan cuenta de la importancia de lo
que está en juego. No se caracteriza la política española por
mirar a un futuro cuyo horizonte no sea el de la próxima
convocatoria electoral. Política mediocre, pírrica, de nulas miras,
que debería superarse para conseguir para la ciudad las grandes
expectativas que aguardan en esos enormes terrenos.
Pero, nada, aquí estamos: unos y otros enfrascados en polémicas
estériles para contentar a sus bases, que hay llamada a filas de
cara al mes de diciembre. Lo primero debería ser insistir con el bic
de la plaza de toros y plantearse que ese lugar debe ser ocupado por
una superficie donde se puedan albergar conciertos y otro tipo de
eventos. Que no se puede estar toda la vida con la carpa
multichachiguay de la polémica y otros postizos semejantes. Un lugar
establecido como cualquier otra población del norte de España
(Santander, Bilbao, San Sebastían, La Coruña) no parece mucho
pedir, creo. Bien está que el alcalde Wenceslao López haya acudido
al ministerio de Defensa con la intención de poner en valor los
derechos que la ciudad posee sobre los terrenos de La Vega. Y
sumamente necesario es que se pongan las pilas para resolver también
sobre los edificios válidos en los terrenos del Cristo de cara a un
uso que evitará la degradación de esa zona.
A uno le gustaría que estos fuesen los temas que se pusiesen sobre
la mesa. Que hubiese un consenso entre todos los partidos políticos
de la ciudad para lograr todo esto. Y no ahogarse en oportunistas
polémicas estériles, ideales para llenar titulares, pero que, al
final, sólo acaban por desprender el humo de un papel al quemarse o,
simplemente, ser enterrado por otra actualidad nueva. Visión de
futuro, señores, esto es lo que necesita la ciudad.
MANOLO D. ABAD
Publicado en el diario "El Comercio" el sábado 24 de octubre de 2015