El cuarto relato de "Sucedió en Oviedo" se titula "La Dosis Hace El Veneno" y lo firma Javier F. Granda.
"LA DOSIS HACE EL VENENO
Siempre había querido hacerlo y me cuidé de no levantar sospechas. Poco a poco la vida de aquel tipo me resultaba más incómoda. Al principio, no pensaba en él ni en el tipo de relación que tendría con Desiré. Fue al paso de los meses, un par de años, supongo, cuando su existencia se me hizo jodidamente molesta.
Se lo fui dejando caer a ella, a modo de bromas que no eran tales, sino que empezaron así para hacerse sugerencias que se convirtieron más tarde en deseos por el mismo hecho de nombrarlos. A todo ello ayudó que el tipo se hubiera quedado sin trabajo, permaneciendo demasiado tiempo en casa y haciendo que ella tuviera menos libertad de movimientos. Le controlaba cada paso, hasta el punto de apropiarse de su coche sin que ella pudiera casi utizarlo." (Javier F. Granda)
