M-CLAN
Auditorio Príncipe Felipe, Oviedo.
Sábado, 5 de febrero de 2011.
El éxito es un monstruo de dos caras. Por una parte, te permite dejar de ser ese esforzado superviviente que se bate el cobre en ingratos garitos donde la supervivencia te conecta con el día a día de lo real; por otro lado, te traslada a un mundo de satisfacción, en el que puedes perpetuar el viejo sueño del ritual de rockero en noches interminables sin preguntarse cuándo se acabarán las monedas. M-Clan se presentaban en Oviedo con nuevos bríos souleros que tiñeron hasta las texturas de muchas viejas canciones y, por supuesto, un nuevo cancionero donde los Black Crowes dejan paso a una banda que busca nuevas luces al final del túnel. Y con ese nuevo álbum "Para no ver el final", con acertados temas como el que da título al disco o "Calle sin luz" o el revelador "Basta de blues", los de Carlos Tarque -todo un torbellino escénico- viran a un tono donde aún no se han encontrado totalmente. Al cumplir la primera hora, uno tiene una sensación de frialdad que se disipa con "Maggie May" y Tarque bañándose entre la multitud del entregado graderío para ya no bajar hasta un remate final con Chapo, mierense bajista superviviente de mil historias (desde La Ruta hasta su tarea como profesional de prestigio a las órdenes de Deluxe o Amaral) de protagonista. Las nubes se disipan y M-Clan se muestran orgullosos de ser quienes son, esos rockeros atractivos para públicos que pocas veces conectarían con las guitarras si no fuera por ellos.
MANOLO D. ABAD
La foto de M-Clan es de Miki López
Publicado en el periódico "La Nueva España" del lunes 7 de febrero de 2011 http://www.lne.es/tv-espectaculos/2011/02/07/perdidos-encontrados/1030205.html