lunes, 25 de febrero de 2013
Un tercer poema de Íñigo Botas
PERDIDO
Estoy perdido, amor, y es por tu ausencia
Inútilmente busco tu mirada
Sigo tu rastro en la noche ensangrentada
Y tu eludes, esquiva, mi presencia
De tenerte a mi lado un solo instante
Me precipita y urge la impaciencia
Mi escasa fuerza gasto en la inconsciencia
Del espejismo que es verte delante
En tu búsqueda agoto la energía
Que en gotas de ilusión me va quedando
Te desvaneces, cruel, a costa mía
Sólo queda el consuelo, consolando
A mí mismo, y a ti, y tu inexistencia
De este oficio, fatal, de poesía
Íñigo Botas