jueves, 9 de agosto de 2012

Crítica concierto Emir Kusturica & The No-Smoking Orchestra

Crítica. Música. -
"La victoria es la fiesta"
EMIR KUSTURICA & THE NO-SMOKING ORCHESTRA
Teatro Jovellanos, Gijón.
Martes 7 de agosto de 2012.
 
Sí, son tiempos de confusión, de gravedad en los rostros y en las almas, de caminar con la cabeza gacha y el pensamiento perdido. Tiempos en los que la supervivencia impone aquella máxima de Horacio de sólo fiar al hoy nuestras miras, de vivir cada momento como si fuera el último. Consciente de que la vida es una infinita broma dispuesta a ponernos a prueba hasta la desesperación, Emir Kusturica y los suyos proponen un show total donde lo musical y lo circense se abrazan en un espectáculo total que arranca la complicidad del público instando a una participación activa que incluye la presencia en las tablas de los propios espectadores. Así, arrastrados a un baile que no es sino una verbena punk que enlaza con el espíritu de fiesta más desinhibida -imagínense el teatro convertido en una verdadera fiesta de prao- articulado sin ningún tipo de complejo. Piezas como "Unza unza time", "Upside down" o "Was Romeo really a jerk?" (para el que monta un improvisado casting a la busca de su Julieta, una preciosidad simpatiquísima llamada Raina, por cierto) discurren desbocadas para capturar hasta al más prejuicioso y exigente del público. Porque podrán hundirnos con cifras y catástrofes de anónimos mercados; tendremos que contemplar el rostro exultante de los triunfadores económicos como un castigo, pero siempre nos quedará la posibilidad de que Kusturica y los suyos nos arrastren a una nueva fiesta para saborear el aroma de una victoria bien distinta de la que pretenden imponernos. Y mañana será otro día para inventar un nuevo milagro y seguir tratando de sobrevivir.
 
MANOLO D. ABAD